Antes que nada hay que aclarar que es la neurogastroenterología: es una rama de la gastroenterología que estudia la interacción en el famoso «eje cerebro-intestino» y que se enfoca en patologías que van desde el recién nacido hasta el adolescente, como el cólico infantil, el estreñimiento, el dolor abdominal, el síndrome de intestino irritable, etc.
Los probióticos han mostrado tener una gran utilidad en este tipo de enfermedades, ¿porque? Porque en estas enfermedades existe algo llamado DISBIOSOIS, que es la perdida del equilibrio de la microbiota intestinal (antes flora intestinal)
En resumen los probióticos que han demostrado utilidad en este tipo de enfermedades son:
En el cólico infanti el Lactobacillus reuteri DSM 17938 es la estrella, pero es importante recordar que la mayor utilidad de este es en niños que se alimentan exclusivamente con leche materna.
En el dolor abdominal: VSL #3, Lactobacillus GG, Lactobacillus reuteri DSM 17938, Bifidobacterium infantis M 631, Bifidobacterium breve M 16v1, Bifidobacterium longum BB5361, unos han mostrado mejoria en la intensidad , otros en la frecuencia e incluso en el hábito intestinal.
En el estreñimiento se ha intentado muchas cepas de probióticos pero ninguna ha mostrado eficacia.
Es importante recordar que aún faltan mas ensayos clínicos, pero definitivamente el origen de los problemas en la neurogastroenterología se relaciona con la alteración de la microbiota por lo que el usar probioticos puede ser una excelente opción en el tratamiento.
En el próximo post hablaremos de los probioticos en niños con autismo.