La semana pasada en el marco del 1er congreso de microbiota, prebioticos y probioticos en la Ciudad de México que se llevo acabo en la Academia Mexicana de Cirugía, tuve la oportunidad de dar una platica sobre este tema que es muy interesante y que en lo personal me apasiona: la relación del cerebro con el intestino y la microbiota. Algo fascinante es como el estrés materno durante el embarazo y el estrés que provoca la separación del recién nacido con la madre influye en la microbiota y en la salud digestiva y mental a corto, mediano y largo plazo en el individuo.
